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Lo colocó entre sus piernas
aprisionándole suavemente con las rodillas, acarició su largo cuello y frotó su
cuerpo con ternura, él lanzó un gemido leve y ella empezó a interpretar la
suite para violonchelo de Johann Sebastian Bach.
Bien con esa espalda tan escultural podría interpretar cualquiera jajaja.
ResponderEliminarPreciosa inspiración la que te dio la foto.
Abrazos
Gracias Montesino, aprecio mucho su lectura. A propósito de su comentario le digo que este micro lo había enviado, hace bastante tiempo, a otro blog pero nunca me lo publicaron y lo tenía por ahí, un poco olvidado, lo que quiero decir es que el relato fue primero que la foto. Navegando por Google me topé con la imagen y me dije: “Wao, este es el micro que escribí” y entonces me decidí a publicarlo aquí.
EliminarSaludos.
Dios qué belleza de palabras..
ResponderEliminarFelicidades
Abrazos
Gracias María, me alegra que le guste.
EliminarSaludos.
¡¡¡precioso Beto!!!.
ResponderEliminarRosy, gracias, sabe que aprecio mucho sus palabras.
EliminarSaludos.
Saldrá una gran melodía, por tan bonitas palabras.
ResponderEliminarSaludos Beto.
El violonchelo es un instrumento muy sensual con un sonido hermoso. Gracias Yolanda, es un halago su comentario.
EliminarSaludos.
Esa espalda de Man Ray te ha sugerido mucho, ¿eh?
ResponderEliminarGracias Juan manuel, es un placer y un honor que pases por mi blog, bienvenido.
ResponderEliminarEste micro fue inspirado por un concierto, por eso quien toca el instrumento en el relato es la mujer. Luego encontré esta foto de un "hipster" que hace un homenaje al trabajo de Man Rey (a quien no conocía) y quedé impactado por la similitud con lo que escribí.
Saludos.
JA,JA,JA,JA. Lo dirías en chiste pero sí se llegan a dar éstas cantantes del orgasmo.
ResponderEliminarSí, hay cierto juego erótico (intencionalmente) inspirado en la sensualidad del violonchelo. Gracias Carlos, agradezco, siempre, sus comentarios.
EliminarSaludos.