Extraida de la web
Se
ovilla sobre las baldosas frías y comienza a temblar cuando los zapatos se
acercan al rincón, donde se ha escondido. Oye que abren la nevera y percibe los
olores que salen del frio hueco. Frente a ella caen algunas migajas e imagina
que alguien se prepara un “sándwich”. Le resulta difícil mantenerse inmóvil,
tiene miedo pero es mayor el hambre. Se desplaza sigilosamente intentando
acercarse a los pequeños residuos y un ligero roce le advierte del peligro.
Levanta la vista y lo último que ve la cucaracha es al pie que baja, en el que se
lee, como una advertencia, “Fly London”.
Participación en la semana 29 del REC (Relatos En Cadena)
Hola, Beto.
ResponderEliminarLo siento por la pobrecilla cucaracha, pero no puedo con estos bichos, lo siento mucho. Al menos, con ese Fly London tuvo una muerte glamourosa.
Muy bien, Beto. Por lo que veo a todos nos ha sugerido cosas relacionadas con la muerte.
Un abrazo muy grande y suerte para la próxima.
Como llevamos el asunto en este planeta, llegará el momento que la única fuente de proteínas a la que tendremos para echarle el diente será a las cucarachas, son indestructibles y pululan por todas partes. A las pobrecitas creo que hasta los entomólogos las odian. A un Fly London que mata a una cucaracha se le va el glamour, por ahí he querido encauzar la idea del micro. Gracias Towanda por la lectura y el comentario.
EliminarSaludos.
Respondo como humano que le da asco encontrarse eso en su casa y más en la cocina o me pongo en el cascarón de ese ser indefenso capaz de resistir a un holocausto nuclear. jaja gracioso relato, Beto.
ResponderEliminarLorenzo D. a las cucarachas solo las quiere Wall-E y es porque es un robot, ellas y los humanos se han declarado la guerra, y ellas la están ganando. Esta yo también me he divertido con esta historia, gracias por comentar.
EliminarSaludos.
Bicho que me atormenta desde que tengo uso de razón, al leerlo en tu relato me parece menos malo y algo mejor. Te ha quedado divertido. Postulo tu relato como el principio de mi determinación de superar ese atávico asco que les profeso. Mucha suerte para el próximo :)
ResponderEliminarCreo que hay algo de psicológico en la animadversión y el asco que nos producen estos bichos, ellas solo intentan sobrevivir como lo hacen todas las especies. El enemigo natural de ellas es la higiene. Me alegra que este micro contribuya a liberarte del asco que provocan (yo, particularmente, odio más a las moscas). Gracias Juan Antonio.
EliminarSaludos.
Elegiste a un bicho extremo.
ResponderEliminarTan asqueroso que celebramos que haya tenido súbita muerte en su final lectura.
Hola Carlos, inicialmente pensé escoger a un escarabajo como protagonista, pero me acordé de Gregorio Samsa que anda por ahí y tuve temor de aplastarlo. Gracias por acercarte hasta mi relato.
EliminarSaludos.
Yo quisiera romper una lanza a favor de las pobres cucarachas, que a fin de cuentas llevan millones de años sobre el planeta. Si encima tiemblan al oirnos acercar, algo de razón llevarán... Un beso, Beto.
ResponderEliminarLas pobrecitas solo intentan sobrevivir, y nosotros contribuimos a su existencia, sola la higiene puede evitar que pululen a sus anchas. Gracias Salamandra por acercarse hasta mi relato.
EliminarSaludos.
ummmh.... otra muerte más en el precipicio de este ovillo en el que todos hemos intentado "tirar del hilo cautelosamente".
ResponderEliminarDesde el inicio de la lectura suponía que era un insecto, y no me preguntes por qué, pero es lo que había intuido. Yo también habría elegido una cucaracha, sólo me ha faltado ese ruido asqueroso que se produce al pisarlas.hubiese sido bueno terminar también con ese ruido ¿no crees?
Un besazo Beto y a seguir con la siguiente frase!!!
Laura.
Sí, creo que es un relato predecible, pero estaba en plan de divertimento y me decidí a enviarlo. Inicialmente pensé en trabajar la onomatopeya del sonido que se produce al aplastarle pero luego me gustó más la irreverencia a la marca de zapatos, que no importa su glamour, alguna vez han pisado (perdonando la expresión) mierda o matado una cucaracha. Muchas gracias Laura, valoro su comentario. Seguro, sigo intentándolo, el concurso es solo un pretexto para escribir.
EliminarSaludos.
Me ha parecido ocurrente, sobre todo valoro, cómo has enlazado la frase con tu historia, reconozco que en eso eres un crack.
ResponderEliminarUn abrazo, Beto.
Gracias Rosy, con este relato he querido divertirme un poco. Me alegra que le guste como he utilizado la frase propuesta.
EliminarSaludos.
Ñah! se puede oír la pisada desde aquí Beto, inchs, tengo un escalofrío bajándome por la espalda que no te cuento, je je. Casi me da pena el bicho.
ResponderEliminarAbrazos.
Jajaja, parece que he escrito un relato de terror, todo el mundo le tiene miedo o asco a las cucarachas. Gracias miguel por pasar y dejar tu comentario.
EliminarSaludos.
¡Vaya¡ Muy ingenioso el final. Jamás hubiera imaginado que era una cucaracha. Un abrazo, Sotirios.
ResponderEliminarAmigo Sotirios, agradezco que encuentres ingenioso a este micro, gracias por pasar y dejar tu comentario.
EliminarSaludos
Vine siguiendo los pasos de Carlos de la Parra, me gustó tu historia, al menos murió bajo una buena marca de zapatos.
ResponderEliminarPor cierto, leí que en un comentario hablabas de Kafka, ¿sabías que en ningún momento dice que se tratara de una cucaracha? Y todos creemos que fue en ese insecto que se convirtió.
Un abrazo.
HD
Bienvenido Humberto, agradezco al sr. Carlos de la Parra que sus huellas te hayan conducido hasta aquí, espero que lo que aquí dejo sea de tu agrado. Me complace que te guste este micro. Parece que hasta en la muerte hay diferencia, es más glamoroso que te aplaste un zapato caro.
EliminarEs cierto, Kafka no dice cual bicho es Gregorio Samsa, creo que los más aceptados son las cucarachas y los escarabajos, yo siempre escojo el escarabajo. Muchas gracias por venir y dejar tu comentario.
Saludos.
Con esas suelas tan sólidas, al menos suponemos que no sufrió. Me he reído mucho.
ResponderEliminarUn saludo
JM
Gracias Juan M. "Suelas" fue el título que se me ocurrió primero para este micro, pero luego me decidí por "Pisada". Me alegra haberte hecho reir.
EliminarSaludos.
No imaginaba el final, me ha gustado mucho tu relato, Beto, pero lo que no me gustan nada son las cucarachas jajajaja.
ResponderEliminarUn beso.
Pobrecitas, las asquerosas cucarachas, nadie las quiere. Gracias María por pasar y dejar su comentario.
EliminarSaludos.