miércoles, 17 de julio de 2013

CHIHUAHUA

B.M.R
 
 
 
 

La transformación comenzó el día que me pidieron “dame la manita”, luego fue: “¡rueda!” y me enseñaron a bailar; a medidas que aprendo ya no soy yo, todo es muy confuso. Últimamente me enfundan en un diminuto y ridículo traje, con el que me siento ultrajada. Mi voluntad ha sido domada y, entre tantas estupideces, me siento como humana.

4 comentarios:

  1. Creo que sí, que muchas veces los hacemos sentir estúpidamente humanos. No faltará mucho para que se inviertan los roles y ella sea el amo. Esa metamorfosis no se detiene.
    Qué difícil es fotografiar perros, que se queden quietitos para captarles la mirada.
    Saludos van, Beto.
    San Montelpare

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    1. A estos lindos perritos no los dejamos ser ellos, al natural, e insistimos en hacerlos parecer a nosotros, con cuantas cosas extranas se nos ocurran. La perra de la foto se llama Princesa y tiene complejos de modelo, le gusta posar para la cámara, fue fácil tomar la foto.

      Gracias Sandra por pasar y dejar su comentario.
      Un gran saludo.

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  2. Estoy segura que así se sienten, si pudieran hablar, nos lo dirían. mucha gente no se da cuenta que "humanizando" a su perro, le roba su naturaleza, a la larga, el instinto animal lo va perdiendo y eso acortará su vida, incluso.
    Una preciosa entrada Beto, no puedo evitarlo los animales me pueden....
    Un cariñoso saludo
    Rosy

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    1. Creo que a nuestras mascotas, para hacerle más llevadera su relación con los humanos, debemos darle cierto nivel de entrenamiento pero sin llegar al punto de la humillación y el maltrato. Rosy, ya me he dado cuenta del amor que siente por los animales, se necesitan muchas más personas como usted.

      Gracias por comentar, me alegra que le haya gustado esta pequeña dedicatoria a la Chihuahua de mi casa.

      Saludos.

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